INSTRUCCIONES PARA NO RESBALAR JAMÁS
Lectura: Salmo 112:1-10
Texto para memorizar: Salmo 18:36:
“ensanchaste mis pasos debajo de mí, y mis pies no han resbalado”.
Introducción: El deseo de Dios es que sus hijos caminen con pasos firmes y nunca resbalen. Dios es el que sustenta nuestros pasos para que esto no ocurra, según Salmos 17:5.
Conclusión: “Hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian las buenas nuevas”. Ayúdenos el Señor para seguir sus pasos hasta el final, sin desmayar.
Pastora Carola Lopez.
