Continúa el recorrido por Venezuela el Pastor y Evangelista Edgar Arias, esta vez en su segunda noche de actividad el escenario fue la ciudad fronteriza Guasdualito capital del Municipio Páez del estado Apure, y es que centenas de guasdualitenses concurrieron en las instalaciones de la cancha techada Francisco Solórzano desde muy temprano para presenciar el evento, siendo esta una de las pocas actividades de concentración masiva realizada en la localidad luego de la feroz pandemia que se vive.
Sin duda alguna fue una noche sin precedentes donde reinó la armonía que caracteriza la cristiandad, conjuntos musicales autóctonos deleitaron los espectadores y creyentes con la música criolla del llano adentro, artistas de la talla de Deivis Herrera hicieron calentar los motores al son del arpa, cuatro y maracas entonando canciones que fueron coreadas por los presente.
Llegado el momento de la predica, el pódium principal se vio conformado por Pastores como Francisco Rosales, Levis Marchan, Elvis Morelo, Edgar arias y su esposa Sandra; el mensaje de esa noche interpretado por el Subdirector internacional de la organización «Luz del Mundo» tomó el curso de enfatizar el poder que ha sido conferido a la Iglesia como el cuerpo de Cristo el Hijo de Dios, citando el relato bíblico ubicado en el libro de Marcos 9:14, donde la manada de cerdos se precipitaron al río ahogándose mientras que los demonios tomaron los cuerpos humanos de aquella región quienes luego procedieron a echar a Cristo de aquel lugar.
Fue una exposición magistral de la palabra que hizo reflexionar a pastores y demás público presente en cuanto a su posición actual ante su Padre Celestial como creyentes que hacen uso o no de la autoridad delegada, quienes recibían este mensaje fueron emplazados a revisar cuanto tiempo tenían sin sentir la presencia del Señor en sus vidas, desde cuando las promesas de la Biblia no tienen el valor que merecen; es el tiempo de volverse al Dios de los milagros, el Dios del Cristo resucitado.
Transcurridos unos 15 minutos luego del inicio de la exposición de la palabra el fluido eléctrico fue interrumpido, todo quedó a oscuras, la bulla producto de la muchedumbre era bastante sin embrago, la voz estentórea que caracteriza al predicador de esa noche le permitió desde el lugar alto de la plataforma, no perder el curso del mensaje trazado. Pasados unos cortos minutos el equipo anfitrión improviso una planta generadora de electricidad lo cual restableció el audio con micrófono, permitiendo avanzar con tranquilidad.
Es de destacar que durante la disertación, el escenario se tornó cada vez más concentrado en lo que se estaba exponiendo, de repente los presentes, cristianos e inconversos comenzaron a danzar, a hablar en lenguas, comenzaron a gritar y parecía que todo se salía de control pero el Espíritu Santo mantuvo el orden de los que recibieron más allá del toque de su presencia, milagros y sanidades, actos sobrenaturales como la desaparición de dolores de cabeza, hernias discales y englinales, masa cancerígenas en los senos de mujeres, desaparición de prostatitis, entre otros.
Convictos de la presencia de Dios aún a oscuras la gente permaneció en las instalaciones del lugar hasta el final cuando fueron despedidos.
